Mi segundo análisis en PakuGamers y la sensación de si será todo lo bueno que debería vuelve a llegar a mi como una sensación que hace que todo el cuerpo me de escalofríos. Pero no os preocupéis, no estoy loco ni nada por el estilo, o al menos eso dijo mi loquero en la última revisión. El problema de la sensación viene con la idea de que siempre se quiere escribir el mejor análisis, el mejor comentario ingenioso o que el post llegue de la mejor manera posible. No por nosotros especialmente o por que nos digan lo bueno que es, sino porque PakuGamers quiere tener ese sello de calidad y por supuesto por querer ser una gran página. Hay días en los cuales estas inspirado y otros en los que no, pero siempre por mi parte se intentara dar lo mejor de mi para ustedes queridos lectores, que os lo merecéis. Que ya sabemos que vais aumentando considerablemente.
Con estas palabras empiezo un análisis un tanto inusual. Es un análisis de un juego Indie y con la capacidad de atracción de cualquier titulo de 20 millones de dólares de inversión. Estoy hablando de un juego creado por los mismos que de Super Meat Boy, que consiguen con un nuevo juego encogernos el corazón y llevarnos al mundo del gore al más puro estilo Jack el Destripador.